Hace algunos meses escribí mi primer post de este blog, sobre la app Yo, que había levantado capital de forma muy rápida, a pesar de tener una funcionalidad muy limitada (ver el post original aquí). En su momento argumenté que ese no era capital inteligente, sino que solo estaba motivado por el “hype” – lo de moda muy temporal – alrededor de la subida repentina en los downloads del app. También tuve un intercambio de posts y tweets con Santiago Rodríguez sobre esto.
Ayer vi un articulo que actualiza sobre lo que a pasado con el app en Slate (leerlo aquí). Aparentemente ha pasado lo que yo predecía. El interés por el app ha descendido bruscamente, como lo muestra el ranking en el AppleStore:

Azul: ranking general; Roja: ranking en categoria de social networks – Source: App Annie
El app ya no figura en el total general y esta alrededor del puesto 250 en la categoría de social networks donde hay pocos apps (estos son números para el AppleStore de USA). Es decir, ya muy pocos usuarios están bajando el app, por lo que claramente pocos lo están usando. Si el uso fuera activo, esos usuarios traerían nuevos usuarios por el efecto de network, pero no se esta dando esa tendencia. Era predecible que los usuarios dejaran de usar la app dada la casi nula funcionalidad una vez que pasara la novedad.
La compañía sigue viva por el dinero que levantó y obviamente están tratando de encontrar un uso y un modelo de negocios para sobrevivir. Me sospecho que las probabilidades que eso pase son bajas. Además si lo logran, creo que se enfrentaran a nuevas apps que han surgido, que también son simples pero ofrecen algo mas de funcionalidad que Yo.
Reitero mi conclusión anterior que esa inversión en Yo no era capital inteligente.